Ángel Di María está viviendo su peor temporada desde que es profesional, algo que sin duda alguna no es una buena noticia para el argentino teniendo en cuenta que el Mundial de Rusia está a la vuelta de la esquina. Jorge Sampaoli no se va a olvidar de él, está claro, pero sus opciones de ser titular pasan por tener muchos minutos en su club, algo que no está sucediendo a lo largo de la presente campaña.
Pocos minutos para un jugador top
Es el primer cambio para Unai Emery, es verdad, pero en lo que va de Ligue 1 solo acumula 554 minutos y es poco probable que supere los 2.000 de las dos campañas anteriores. Ha sido titular en seis partidos de la competición doméstica y en la Champions League solo ha jugado 53 minutos, así que es normal que no esté cómodo con su situación en el PSG.
Obligados a venderle
El club, que está obligado a cumplir con el fair play financiero después de gastarse un dineral en los fichajes de Neymar y Kylian Mbappé, tiene en mente su traspaso de cara al mercado de invierno. De hecho, le ha puesto precio para que no haya ninguna duda.
El Barça ofreció 40 millones de euros durante el pasado verano para ficharle a la desesperada, a última hora. Muy poco teniendo en cuenta que acababan de ingresar 222 millones de euros por Neymar. De ahí que la respuesta de Nasser Al Khelaïfi fuera negativa.
Un precio un tanto elevado
El máximo mandatario del PSG no se sentará a negociar por menos de 75 millones de euros, que es justo lo que pagó el Manchester United al Real Madrid en su día, y 12 kilos menos de lo que desembolsaron para arrebatárselo a los ingleses. En mi opinión es mucho teniendo en cuenta que su caché no es el de antes.
¿Su destino está en la Premier?
Me extraña que no se conformen con unos 60 millones, puesto que sería una cifra que les permitiría recuperar la inversión llevada a cabo en su día. Dudo que el Barça vaya a entrar en la puja por mucho que Leo Messi exija su fichaje, así que creo que su futuro está en la Premier League, de la que por cierto no guarda muy buenos recuerdos.