Xabi Alonso es uno de esos futbolistas con capacidad para levantar la cabeza y sorprender al portero rival desde más allá del centro del campo. Le hemos visto marcar goles a decenas de metros de distancia de la portería a lo largo de su carrera deportiva.
Sin ir más lejos, en 2006, cuando vestía la camiseta del Liverpool, un aficionado de dicho equipo se embolsó 25.000 libras (unos 34.000 euros) al apostar que el tolosarra marcaría un gol desde más de medio campo durante aquella temporada. Lo logró disparando desde unos 60 metros en un partido correspondiente a la tercera ronda de la FA Cup ante el Luton.
Duelo perdido
El caso es que ahora no está tan fino. No puede presumir de golpeo de balón a tenor de lo ocurrido en uno de los últimos entrenamientos del Bayern de Múnich. El joven Lucas Scholl, hijo del mítico Mehmet School que también defendió la camiseta del conjunto bávaro, le retó a disparar varias veces desde muy lejos para ver quién lograba más goles haciendo que el balón entrara sin botar antes de la línea de puerta.
Como podrás ver a continuación, el canterano de 19 años le ganó la partida ante la atenta mirada de Pep Guardiola y sus compañeros en un día muy lluvioso.