Menudo partido más envenenado disputó ayer el Real Madrid ante el Al-Jazira, el invitado al Mundial de Clubes. Los hombres entrenados por Zinedine Zidane sufrieron mucho ante un rival muy inferior y ganaron gracias a un gol de Gareth Bale que llegó a falta de menos de 10 minutos para el final.
Demasiados regalos en defensa
Se adelantaron los asiáticos por mediación de Romarinho, que sin duda alguna fue uno de los mejores de su equipo. El brasileño aprovechó la fragilidad defensiva de los blancos para inaugurar el marcador en el minuto 41 con un buen disparo tras evitar a Raphael Varane, que le defendió fatal. El francés, lejos de tapar la portería, se colocó a dos metros de distancia y le permitió hacer lo que quiso.
Cristiano inició la remontada
La reacción llegó en la segunda parte, poco después de que el árbitro anulara el segundo del Al-Jazira en una contra en la que los jugadores del Madrid se durmieron. Fue Cristiano Ronaldo el encargado de ver puerta aprovechando un pase de Luka Modric al área. El portugués controló y se dio la vuelta muy rápido. Estaba solo y pudo disparar con potencia y colocación para superar al portero.
Los minutos pasaban y el Madrid no marcaba el gol de la victoria, y eso que tuvo muchas ocasiones para lograrlo. Eso sí, al mismo tiempo también tuvo algún que otro susto que le hizo dudar incluso del empate.
Bale salvó los muebles
Tuvo que ser Gareth Bale, que llevaba un minuto en el césped, el que le dio el triunfo al campeón de Europa rematando de primeras un pase de Lucas Vázquez que a punto estuvo de tocar Cristiano.
Final ante el Gremio
La final tendrá lugar el próximo sábado 16 de diciembre a partir de las 18:00 horas. ¿El rival? El Gremio brasileño, que se impuso a Pachuca en semifinales. Jugando al mismo nivel que ayer seguro que tendrán muchos problemas para volver a ganar el Mundial de Clubes.