José Pedrozo, futbolista del Rangers de la segunda división paraguaya, trató de ahorcar al árbitro del partido que les enfrentó al Deportes Concepción después de haber visto la segunda cartulina amarilla en el minuto 77. Al parecer, Marcelo Miranda, colegiado de la contienda, había hecho repetir tres veces un penalti con anterioridad.
Sus compañeros tuvieron que placarle como si fueran jugadores de rugby, todo ello para que la cosa no pasara a mayores. Ahora, el árbitro dice que no le denunciará, aunque el cabinero que estaba a cargo de la seguridad del estadio dice que sí lo hará.
Por cierto, Deportes Concepción ganó por 3-0.