Carlos Tévez se negó a jugar contra el Bayern de Múnich cuando el partido se puso muy cuesta arriba. Los ingleses perdían por 2-0 en el Allianz Arena y Roberto Mancini pensó en él para tratar de darle la vuelta a la tortilla. Sin embargo, el argentino no quiso calentar y a día de hoy podemos confirmar que su salida del club es inminente, algo que no debería sorprendernos porque su divorcio con el técnico italiano viene de muy atrás.