Desde el Reino Unido nos llega un rumor difícil de creer. El ‘Daily Mail’ asegura que John Terry se ha ofrecido al Valencia para incorporarse en el mercado de invierno. Su continuidad en el Chelsea parece complicada y es por ello que ya está negociando con varios clubes para seguir jugando al máximo nivel.
El capitán del conjunto londinense cumplirá 32 años en diciembre. Es un veterano, pero todavía le pueden quedar un par o tres de temporadas buenas. No quiere calentar banquillo en Stamford Bridge y por eso está dispuesto a dejar el equipo de su vida para probar suerte en una liga tan distinta de la Premier League como la nuestra.
François Gallardo, agente oficial FIFA, está negociando con el Valencia para que su representado pueda firmar un contrato de 18 meses. Todo parece muy bonito, porque a Mauricio Pellegrino le hace falta un central de calidad para reforzar la línea defensiva. Esta temporada han encajado 11 goles en 8 partidos, una cifra que no suele ser habitual para un equipo que aspira a estar entre los cuatro mejores de España.
Su elevada ficha es el principal inconveniente
Pero en esta historia no todo es tan bonito como parece. Terry cobra actualmente 9 millones de euros en el Chelsea, un pastizal que ningún jugador del Valencia cobra ni por asomo. Es verdad que si viene rebajará sus pretensiones económicas consciente de que el presidente no es Roman Abramovich, sino Manuel Llorente. Sin embargo, dudo que quiera cobrar menos de la mitad, una cantidad que ya de por si está fuera del presupuesto del club.
El otro problema es el que tiene que ver con las novias de los jugadores. No creo que les haga mucha gracia a Roberto Soldado y compañía que Terry comparta vestuario con ellos. No vaya a ser que comparta algo más que una taquilla…