Los jugadores del Real Madrid tienen motivos más que suficientes para dejarse la vida en Milán a partir de las 20:45 horas de mañana. El pasado miércoles pactaron una prima de 600.000 euros por jugador, una cantidad que supera con creces a la que percibieron cuando ganaron la Décima, puesto que aquel año fueron 400.000 euros por barba. Esto, en parte, explica por qué los suplentes y los que ni siquiera van convocados suelen celebrar con tanta alegría los títulos importantes.
A Florentino le urge ganar
Los capitanes se reunieron con Florentino Pérez en Valdebebas y negociaron sin la ayuda de sus representantes, que son los que siempre se reúnen con el presidente blanco cuando toca hablar de dinero. Sergio Ramos, Marcelo, Pepe y Cristiano Ronaldo salieron del despacho con una sonrisa de oreja a oreja y Florentino ahora ya sabe que le tocará desembolsar algo menos de 20 millones de euros si sus jugadores vuelven a levantar la ‘Orejona’.
Las primas son todo un clásico
El tema de las primas es algo habitual en el mundo del fútbol. De hecho, no es algo reservado a los grandes clubes, sino que hay otros más modestos que priman a sus jugadores por lograr un ascenso o por evitar el descenso.
La temporada pasada fue el Barça el que se rascó el bolsillo para premiar a sus jugadores por el triplete. Fueron 52 millones de euros a repartir entre una plantilla que este año habrá vuelto a cobrar por el mismo concepto, aunque la cantidad será inferior porque esta vez no han sido capaces de ganar la Champions.
Conquistar la Champions es sinónimo de ingresar mucho dinero
A pesar de los pesares, los números van a cuadrar en el Santiago Bernabéu. Se estima que el campeón de la máxima competición europea se lleva unos 120 millones de euros. No solo en concepto de campeón, sino por el hecho de jugar la Supercopa de Europa y el Mundial de Clubes, que también generan importantes ingresos.