Roberto Soldado no ha empezado con buen pie esta temporada. No marca goles y el equipo al que lidera no acaba de funcionar como se espera. Sin embargo, ayer apareció para darle los tres puntos al Valencia en un duelo decisivo ante el BATE Borisov, equipo que hasta hace pocas horas era la revelación de la presente edición de la Champions League.
El internacional español se encargó de abrir el marcador después de que Diego Alves salvara varias ocasiones de gol de los locales. Lo hizo transformando un penalti que él mismo provocó. Engañó a Andrey Gorbunov y el 0-1 subió al marcador al filo del descanso.
Tras la reanudación llegó el recital de Soldado. Sacó a pasear su fusil y no desaprovechó dos buenas asistencias. La primera fue de Andrés Guardado en el minuto 55 y la segunda de Tino Costa en el 68. A partir de ahí el resultado no peligró para los de Mauricio Pellegrino, que ahora mismo son líderes de su grupo con 6 puntos, los mismos que el Bayern de Múnich, que derrotó al Lille a domicilio por 0-1, y el BATE Borisov.