Inmediatamente después del sorteo de las semifinales de la Champions League, se ha celebrado el sorteo de la Europa League. Dos equipos italianos, uno ucraniano y el Sevilla. El vigente campeón también estaba en el bombo, y como es lógico ninguno de sus rivales quería cruzarse con él. Ayer dio síntomas de debilidad ante el Zenit de San Petersburgo, pero también demostró que es capaz de superar cualquier adversidad.
La Fiorentina es un hueso duro de roer
Los hombres del enérgico Unai Emery se enfrentarán a la Fiorentina, un equipo muy rocoso que llegó a poner a la Juventus contra las cuerdas en la Coppa Italia. Han llegado por méritos propios tras eliminar a la Fiorentina en octavos y al Dinamo de Kiev en cuartos. Tiene a jugadores tan peligrosos como Joaquín, Borja Valero, Mario Gómez o Mohamed Salah, así que los andaluces tendrán que hacer dos grandes partidos si quieren estar en la final de Varsovia.
Benítez puede agrandar su leyenda en Europa
La otra eliminatoria enfrentará al Nápoles y al Dnipro Dnipropetrovsk. Los ucranianos han llegado a estas semifinales contra todo pronóstico y quieren seguir progresando. Sin embargo, van a tenerlo muy difícil ante un equipo que viene de dejar fuera al Wolfsburgo, uno de los favoritos de la presente edición de la Europa League.
Rafa Benítez es un gran estratega y me temo que va volver a llegar a una final europea. Pocos entrendores saben afrontar tan bien las eliminatorias a doble partido y estoy convencido de que los napolitanos no fallarán. Gonzalo Higuaín, José Callejón y Marek Hamsik tratarán de repetir protagonismo para llevar a los suyos a la gran final.