Se acerca el final de la temporada y los rumores se adueñan de la mayoría de periódicos deportivos. Uno de los que está sonando con más fuerza en las últimas horas es el que sitúa a Sandro Ramírez en el Sevilla. El delantero del Málaga, que llegó a La Rosaleda procedente del Barça con la carta de libertad, podría defender los colores de la entidad hispalense previo pago de 6 millones de euros, una cláusula de rescisión que muchos clubes se pueden permitir.
Tiene para elegir
El Atlético de Madrid y el Everton también le siguen la pista. De hecho, Ronald Koeman presenció el último partido de los andaluces para seguir de cerca sus evoluciones. Sin embargo, el Sevilla es el club que habría convencido al futbolista y a su representante, Ginés Carvajal.
Goles son amores
Sandro cumplirá 22 años en julio y tiene mucho margen de mejora. Esta temporada acumula 14 goles y por ello no es de extrañar que la afición le pida a gritos que se quede cada vez que se llega al minuto 19 de un partido. De hecho, Míchel también ha manifestado sus preferencias públicamente, llegando a decir que pondría parte de su sueldo para que se quedara. Desde que llegó al banquillo ha marcado 7 goles en poco más de un mes convirtiéndose en una pieza clave dentro de su esquema.
En Málaga son pesimistas
Estaremos atentos a lo que suceda en las próximas semanas, pero me temo que Sandro no seguirá vistiendo la camiseta del Málaga. El proyecto deportivo y la ficha que le pueden ofrecer están por debajo de las propuestas de sus pretendientes.