La selección española sub-21 jugará la final del Europeo después de derrotar a Italia en semifinales por 3-1. Los de Albert Celades fueron superiores y supieron sufrir ante un combinado que no se vino abajo ni cuando se quedaron con uno menos. La final se disputará el próximo viernes a las 20:45 horas y el rival será Alemania, que se impuso a Inglaterra en la tanda de penaltis tras empatar 2-2.
Capitán y goleador
El gran protagonista de la noche fue sin duda alguna Saúl Ñíguez. El joven futbolista ilicitano de 22 años anotó los tres goles de ‘La Rojita’ en una segunda parte que no olvidará jamás.
El primero llegó tras un pase de Dani Ceballos, que firmó un partidazo para dejar claro que puede jugar en un grande de España o de Europa. El centrocampista del Atlético de Madrid controló y disparó ajustando el balón con potencia, lo que hizo inútil la estirada de Gianluigi Donnarumma.
Los transalpinos se quedaron con uno menos tras una fea entrada en el centro del campo, pero eso no les cortó las alas. Todo lo contrario. Bernardeschi se inventó una gran acción individual en la frontal del área y disparó con la fortuna de que el balón tocó en Vallejo, lo que descentró a un Kepa que no pudo reaccionar a tiempo para evitar el empate.
En ese momento llegaron las dudas. España tenía que mover ficha y lo hizo con contundencia, con un enorme disparo de Saúl desde muy lejos que se coló cerca de la escuadra. Y por si había alguna duda, Marco Asensio apuró la línea de fondo y la puso atrás para que completara su gran partido, el que le permite ser Bota de Oro del torneo.
Enrique Cerezo debe estar contento y nervioso a la vez
Después de esta actuación, y de otras a las que hemos asistido con anterioridad, en el Atlético de Madrid estarán trabajando en una nueva renovación que implique un aumento considerable de su cláusula de rescisión. Dicen que el PSG anda tras sus pasos…