Romarinho, el hijo de Romario, es el encargado de suceder a su padre como una estrella del fútbol brasileño. De momento tiene 16 años y no lo hace nada mal defendiendo la camiseta del Vasco da Gama. Eso sí, tendrá que crecer un poco más si quiere convertirse en un buen jugador, aunque Romario era muy bajito y fue uno de los mejores delanteros de la historia. El tiempo dirá.