El Celta fue capaz de darle la vuelta a la eliminatoria de dieciseisavos de final de la Copa del Rey. Perdió 2-0 ante el Almería en la ida, pero se aferró a Balaídos para llevarse el partido de vuelta por un 3-0 que vale su peso en oro.
Los gallegos fueron a por todas desde el primer minuto. De hecho, el argentino Augusto Fernández dispuso de una gran ocasión en el minuto dos, pero su chilena no fue suficiente para batir a Diego García, que estuvo bastante seguro durante toda la noche.
Asedio vigués
Para el primer gol del partido fue necesario esperar hasta la segunda parte. El coreano Park Chu-Young abrió la lata en el minuto 54 y los poco más de 10.000 aficionados que acudieron al estadio se vinieron arriba.
A partir de ese momento todo cambió. El Almería empezó a tener alguna que otra ocasión para sentenciar la eliminatoria y el Celta volvió a plantarse ante la portería de Diego García con mucho peligro. Sin embargo, el tanto que forzó la prórroga no llegó hasta el minuto 93. Roberto Lago marcó tras un córner que acabó en el segundo palo, donde pudo rematar libre de marca.
De Lucas decide la eliminatoria
En la prórroga dominó el Celta, aunque ambos equipos estaban muy cansados. Quique de Lucas fue el héroe del partido al marcar el 3-0 definitivo. Recibió un balón a la espalda y definió muy bien regateando a Diego García. Todavía quedaban 10 minutos más de tiempo extra, pero el marcador ya no se movió.
Ahora los hombres de Paco Herrera se medirán al Real Madrid en octavos de final. La ida se jugará en Balaídos y la vuelta en el Santiago Bernabéu.