Gareth Bale por fin ha podido posar con la camiseta del Real Madrid en el palco de honor del Santiago Bernabéu. Florentino Pérez ha leído uno de esos discursos que te hacen pensar que está hablando de un hombre que acaba de llegar a la Tierra para acabar con todas las enfermedades que existen. Pero no, no es más que un simple jugador de fútbol que dicen que ha costado 91 millones de euros.
El galés, sonriente en todo momento, se ha enfundado la camiseta del que será su nuevo equipo durante los próximos años. 10 millones de euros netos por temporada y la posibilidad de ganar títulos importantes le han seducido.
Mucha expectación
Más de 30.000 personas le han aclamado en una zona del Santiago Bernabéu habilitada para la presentación, lo cual no está nada mal teniendo en cuenta que mucha gente estaba trabajando. Ha hecho unos cuantos toques de balón, ha saludado una y otra vez y hasta se ha animado a besar el escudo. Todo ello después de presentarse ante el madridismo con un «¡Hala Madrid!» que a más de uno le ha hecho dudar de su procedencia. ¿Será del barrio de Salamanca y todavía no lo sabemos? Qué más da, lo que importa es que aporte espectáculo a la que para muchos sigue siendo la mejor liga del mundo.