Como muchos de vosotros sabréis, Robinho jugará cedido en el Santos la temporada que viene. Eso significa su regreso a casa, un regreso que de momento se ha planificado por todo lo alto. El astro brasileño aterrizó en el campo de su nuevo equipo en helicóptero y acompañado de Pelé, quien también fue una leyenda en el club brasileño.
Unos 15.000 aficionados esperaban ansiosos su presentación. Le ovacionaron y le aplaudieron a más no poder. Robinho es muy querido allí y saben que él puede llevar al equipo a lo más alto. El futbolista, por su parte, es feliz porque sabe que vuelve a casa y porque podrá volver a disfrutar de esos minutos que parecía que se le iban a negar en el Manchester City de Roberto Mancini. Su objetivo es estar en el Mundial 2010 de Sudáfrica.