Nolito no vestirá la camiseta del Barça la temporada que viene salvo milagro de última hora. El gaditano no podrá volver a Barcelona como era su deseo porque Josep Maria Bartomeu es de la cofradía del puño cerrado. ¿Qué son 18 millones de euros para un club de semejante envergadura? Eso mismo es lo que se pregunta Felipe Miñambres, el nuevo director deportivo del Celta. En Balaídos saben que es imposible frenar su salida y están tranquilos porque tarde o temprano recibirán la cantidad que figura en su cláusula de rescisión.
El Etihad Stadium será su destino
Los dos buenos partidos que ha firmado en la Eurocopa de Francia han disparado su caché. Aquí ya sabíamos que era muy bueno, pero en Inglaterra y en Italia no lo tenían tan claro. Mientras el Barça trata de negociar a la baja como si tuviera la sartén por el mango, el Manchester City espera el «sí quiero» de Nolito con los 18 kilos preparados y algo de propina por si fuera necesario.
Pep Guardiola le quiere en su plantilla y hace bien. Tendrá a un jugador muy desequilibrante que puede jugar en banda, en la mediapunta o como delantero centro. Hablar de Nolito es hablar de peligro constante, porque aunque a veces agache la cabeza y no vea a sus compañeros, tiene calidad y mucho gol, cualidades que le convierten en un futbolista ideal para cualquier equipo.
Busquets lanza un mensaje muy claro a Bartomeu
Sergio Busquets, en declaraciones a Onda Cero, ha dejado caer que el precio de Nolito es una ganga teniendo en cuenta cómo está el mercado:
Ahora por 18 millones de euros solo compras una bota de un gran jugador, así que el precio de Nolito es un buen precio.
Es una indirecta muy directa que Bartomeu debería pillar a tiempo. Si no lo hace en las próximas horas, el de Sanlúcar de Barrameda harás las maletas para jugar en la Premier League después de las vacaciones. Estaba dispuesto a cobrar menos para volver al Camp Nou y estar a las órdenes de Luis Enrique, con quien coincidió en el Celta. Sin embargo, la paciencia tiene un límite y el de Nolito ya se ha rebasado.