Samir Nasri se ha desvinculado definitivamente del Manchester City. El futbolista francés ha decidido abandonar la plantilla porque el panorama no era alentador para él desde que llegó Pep Guardiola al Etihad Stadium.
La temporada pasada salió cedido al Sevilla, donde rindió a un nivel aceptable. Sin embargo, el técnico de Santpedor no ha querido darle una oportunidad y le ha abierto las puertas de salida de par en par.
Se va por muy poco dinero
En su día pagaron 27,5 millones de euros al Arsenal para hacerse con sus servicios. Hoy se va por 3,2 millones de libras (unos 3,5 millones de euros al cambio actual), así que los citizens no han hecho un buen negocio a la hora de traspasarlo. Se nota que lo único que querían era desprenderse de su elevada ficha, ya que ganaba 170.000 libras semanales (unos 185.000 euros semanales).
No será el único galáctico del equipo
En su nuevo equipo, el Antalyaspor turco de Samuel Eto’o, Jérémy Ménez y Johan Djourou, cobrará 4 millones de euros más una cantidad variable que percibirá en función de que se cumplan una serie de objetivos. Eso por cada una de las dos temporadas que ha firmado, por lo que podríamos decir que todavía está a tiempo de volver a una gran liga si lo hace bien en Turquía, donde desgraciadamente no tendrá mucha visibilidad.
Pocas ofertas seductoras para jugar en una gran liga
La verdad es que me sorprende que se haya despedido del City para jugar en un equipo poco conocido a nivel internacional. Lo jugará todo y eso puede acercarle al próximo Mundial de Rusia, pero Didier Deschamps no creo que esté muy enganchado a la liga turca. El problema es que no había ningún club europeo dispuesto a pagarle tanto como los otomanos, así que se ha decantado por la oferta que más le ha satisfecho a nivel económico.
Nasri se despide del City con 30 años tras haber disputado 176 partidos en los que ha marcado 27 goles. Además, ha ganado la Premier dos veces, la Copa de la Liga y la Community Shield. A partir de ahora jugará en un equipo que la temporada pasada acabó quinto en Turquía y que pretende colarse entre los cuatro mejores del país a corto plazo para jugar en Europa.