José Mourinho acaba de cerrar su renovación con el Inter de Milán, un claro gesto que demuestra que no se moverá del conjunto italiano para recalar en el Real Madrid. Pese a que tenía contrato hasta junio de 2011, este se ha ampliado hasta junio de 2012.
Massimo Moratti, máximo mandatario del club milanés, no ha podido ocultar su satisfacción. Además, en señal de confianza hacia el técnico luso, le ha retirado la cláusula de rescisión de 7,6 millones de euros que tenía que pagar si se quería marchar a otro club rompiendo el contrato.