José Mourinho es muy optimista sobre sus posibilidades de fichar por el Manchester United. Por ahora no hay más que un acuerdo verbal y un presunto precontrato firmado, pero está convencido de que los diablos rojos le ofrecerán el privilegio de sentarse en el banquillo de Old Trafford cuando termine la temporada. Eso es lo que parece teniendo en cuenta que ha empezado a buscar casa cerca de Mánchester, concretamente en Cheshire.
No entiende las palmaditas en la espalda de Van Gaal
Lo que no le ha gustado ni un pelo es que el propietario del club, Ed Woodward, haya salido a la palestra para respaldar a Louis van Gaal. De hecho, no ha sido el único que ha decidido echarle un capote al técnico holandés, ya que Sir Alex Ferguson, el actual director deportivo del United, también ha querido mostrar su apoyo.
Puede que lo hagan para jugar al despiste o para que Van Gaal no se deje ir. No hay que olvidar que están peleando por la cuarta posición que te da derecho a jugar la Champions League, así que les conviene tener enchufados desde el entrenador hasta el utillero. En estos momentos están a un punto de sus vecinos y no hay que descartar que cumplan su objetivo, si bien es cierto que el calendario que tienen por delante no es fácil (les que jugar contra el Tottenham, el Leicester City y el West Ham).
El West Ham es precisamente el rival que tendrán que superar el próximo miércoles en la única competición que pueden ganar. El replay de los cuartos de la FA Cup está servido y ya veremos si Van Gaal saca toda su artillería o da descanso a sus cracks pensando en la Premier.
La paciencia tiene un límite
Volviendo al tema del respaldo, hay que decir que Mourinho espera que el United dé un paso al frente pronto. No quiere un comunicado oficial porque entiende que no es lo que toca, pero le gustaría firmar algún que otro papel en privado que le comprometa al 100%.