Hoy se jugó uno de los mejores partidos que se pueden ver. Argentina y Brasil se midieron en Doha en un encuentro que tuvo poco de amistoso y que sirvió para promocionar la candidatura de ese país para organizar el Mundial 2022. Ambas selecciones querían ganar pero fue la albiceleste la que logró llevarse el gato al agua. ¿Por qué? Pues porque simplemente cuentan en sus filas con el mejor jugador del mundo: Leo Messi.
Las ocasiones llegaron en la primera mitad para unos y otros. Neymar brilló por su gran trabajo y Ronaldinho llamó la atención más que otra cosa volviendo a lucir el 10 de la ‘canarinha’. Messi, por su parte, tuvo que hacer un trabajo bastante sacrificado, teniendo que bajar a recuperar balones y siendo él quien fabricara las jugadas de peligro.
También hay que destacar el partido de David Luiz, un central que pide a gritos dar el salto a una gran competición europea. Dani Alves, siempre muy expeditivo, envió el balón al larguero en la primera mitad disparando a bote pronto. Fue la mejor ocasión de los brasileños en todo el partido.
Ya en la segunda mitad, con ambos equipos creando poco peligro y con el 0-0 como marcador que parecía definitivo, apareció Messi para recuperar el respeto que sólo parece haber perdido en Argentina, donde tienen ojos para Diego Armando Maradona y poco más. El crack del Barça recuperó un balón en el centro del campo y se marcó un jugadón para dar la victoria a la albiceleste en el tiempo de descuento.