El Manchester United ya gana partidos con Juan Mata en el campo. Ayer debutó partiendo desde el inicio y fue sustituido y ovacionado en el minuto 84. No vimos su mejor versión, pero es que tampoco jugó donde jugará a lo largo de la temporada. La suplencia de Wayne Rooney y Adnan Januzaj le llevaron a ocupar una posición un tanto perdida por delante de la media, muy cerca de Robin van Persie. Es verdad que lo suyo es actuar en la mediapunta, pero ayer no estaban todas las piezas de un United que quiere resurgir con el asturiano.
La pegada lo arregla todo
La pegada salvó a los de David Moyes. Van Persie, que volvía de una lesión, hizo el 1-0 en el minuto 6, mientras que Ashley Young se encargó de certificar la victoria con un tanto en el minuto 59. El Cardiff City, colista de la Premier League, poco o nada fue capaz de hacer para darle la vuelta al partido mientras Ole Gunnar Solskjær, un ex del United, se desesperaba desde el banquillo.
Problemas en el centro del campo
Una vez más quedó claro que los diablos rojos no se entienden en el centro del campo. Falta ese juego combinativo que siempre habían practicado, aunque con Mata en el campo todo será mucho más fácil. El internacional español es de los que bajan a buscar el balón para asociarse continuamente. Un fiel seguidor del tiki-taka que tan grande ha hecho a ‘La Roja’ en los últimos años. Seguro que en Old Trafford disfrutarán mucho con su fútbol, ya que le sobra imaginación.