Parece mentira que tengamos que destacar una racha de cuatro victorias consecutivas en todo un Manchester United, pero lo cierto es que el equipo de Louis van Gaal tocó fondo en Dinamarca, donde cayó en la Europa League contra todo pronóstico.
Después lo arreglaron en la FA Cup y en el partido de vuelta gracias a Marcus Rashford, que días después volvió a ser protagonista en la victoria ante el Arsenal. Ayer, ante el incómodo Watford de Quique Sánchez Flores, volvieron a sumar de tres en tres y ya tienen los mismos puntos que el Manchester City, que con un partido menos es el equipo que marca el acceso a la Champions League.
Mata, genio y figura
En esta ocasión no fue un chico de 18 años el que acudió al rescate. Si Van Gaal respiró tranquilo fue gracias a Juan Mata, un hombre que siempre diré que está infravalorado. El asturiano, que lució el brazalete de capitán, resolvió la contienda a falta de 7 minutos para el final con un tiro libre fantástico.
Memphis Depay pasó por encima de la pelota para despistar y el ex del Chelsea se encargó de ponerla muy cerca del palo derecho de la portería defendida por Gomes, que no pudo evitar el tanto pese a estirarse considerablemente.
Vuelve la esperanza
Old Trafford rugió con el tanto del español y ahora más que nunca vuelven a creer en su equipo, que todavía puede acabar en puestos de Champions y ganar la Europa League y la FA Cup. De hecho, incluso pueden ganar la Premier League, aunque estando a 10 puntos del Leicester City a falta de 10 jornadas no les queda otra que ganarlo absolutamente todo y esperar a que los de arriba vayan pinchando.