Dimitri Payet se ha convertido en uno de los mejores jugadores de la Eurocopa 2016. Los dos goles que ha logrado le sirven para ser el máximo realizador de la competición y han ayudado a su selección, que tras la agónica victoria de ayer ante Albania se ha metido en los octavos de final del torneo.
El espectáculo, eso sí, no está en el césped por mucho que el jugador del West Ham nos esté deleitando con su enorme talento. El espectáculo lo ponen las mujeres de los jugadores que están acudiendo a los partidos, y de entre todas ellas podríamos destacar a Ludivine, su esposa.
Una aficionada más
Es rubia, tiene los ojos azules y no se pierde ni un partido. No sabemos si le gusta el fútbol, pero está entregada a la causa y va a apoyar a los de Didier Deschamps hasta el final.
Junto a ella siempre aparece Noa Payet, su hijo de seis años. También tienen otro llamado Milan, como el de Gerard Piqué y Shakira, pero por ahora no se ha dejado ver por las gradas, tal vez porque tiene 2 años y todavía es un poco pequeño.
A Ludivine le sienta muy bien la camiseta de la selección francesa. Los cámaras no han tardado en localizarla desde que arrancó el campeonato y ayer nos la mostraron justo cuando Payet hizo el 2-0 ante Albania.
Parte del éxito
La estabilidad emocional es uno de los secretos del éxito deportivo. Tener al lado a una mujer que te apoya es de gran ayuda a la hora de superar momentos tan difíciles como los que habrá vivido el internacional galo a lo largo de su carrera deportiva. Ahora viven en Londres y les va muy bien, pero no hay que descartar que se muden a Madrid si la oferta del Atlético prospera.