Los cinco mejores pivotes defensivos del mundo

Ser pivote defensivo no es algo agradecido. Trabajas mucho y brillas poco. No vistes como una estrella, sino que debes ponerte el mono de trabajo para bajar a la mina cada domingo. Te ensucias y rara vez celebras goles en primera persona.

Los periódicos normalmente solo se acuerdan de los que golean y paran penaltis, pero difícilmente se acuerdan de ese jugador que cortó un contraataque decisivo en el centro del campo. Por suerte, la gente que sabe de fútbol sí que se fija en ellos y sabe apreciar lo mucho que pueden aportar a un equipo ejerciendo sus labores subterráneas.

A continuación te hablaré de los que para mí son los cinco mejores pivotes defensivos del mundo. Evidentemente, no es una lista cerrada. Espero tus comentarios para que podamos debatir sobre otros grandes jugadores que ocupan dicha demarcación.

Sergio Busquets

«El Pulpo de Badia» no se ganó ese apodo porque sí. Desde que Pep Guardiola decidió llevárselo al primer equipo, Busquets ha demostrado ser un jugador muy maduro e inteligente. Sabe dónde debe colocarse en todo momento para recuperar el balón y sus largas piernas le son de gran ayuda en dicha tarea.

Cuando lo tiene en sus pies no se complica la vida y normalmente se asocia con uno de los jugones que tiene al lado. Ha sido el sustento del mejor Barça y la mejor selección española de la historia. Un tipo idolatrado por Vicente del Bosque que conserva la humildad que siempre le ha caracterizado, y que solo tiene un defecto: le va la comedia.

Nemanja Matic

Es uno de los fijos en el once ideal de José Mourinho. El técnico portugués ha definido el centro del campo con dos pivotes que son como la noche y el día. Cesc Fábregas es ofensivo y Matic es defensivo. El serbio destaca por su envergadura y por ser de los que nunca se arrugan. Pone a cada uno en su sitio cuando hay que hacerlo y se suma al ataque cuando hay una jugada a balón parado. Medir 1,94 metros de altura le permite ser un segurod de vida en el juego aéreo.

Javier Mascherano

«El Jefecito» también se ha ganado su apodo a pulso. Aunque Luis Enrique y sus predecesores le hayan colocado como central para suplir las carencias que el Barça tiene en esa posición, donde se siente más cómodo es actuando de pivote defensivo.

En esa posición manda, reparte juego y corta decenas de balones cada partido. Sabe leer muy bien los partidos y suele anticiparse a sus rivales. Es rápido al corte y tampoco se complica la vida a la hora de sacar el balón jugado con criterio. Además, pese a medir 1,75 metros de altura, es difícil ganarle en un balón aéreo.

Yaya Touré

Es uno de los futbolistas mejor pagados del mundo y con razón. Yaya Touré cambió el Barça por el Manchester City para seguir siendo el rey del centro del campo. Lo corta todo, tiene una calidad espectacular y le pega de fábula desde fuera del área. Es un líder que cualquier equipo grande de Europa desea tener en su plantilla.

Al igual que Matic, destaca por su altura. Mide 1,91 metros, lo cual no le impide pisar el balón como si estuviera jugando al fútbol sala. Es mi preferido de la lista.

Ross Barkley

Este último no es tan conocido por el simple hecho de jugar en el Everton. Por eso y porque solo tiene 21 años. Mide 1,88 metros de altura y se ha ganado un hueco entre los mejores centrocampistas de la Premier League. Por eso varios clubes andan tras sus pasos, pero de momento no quiere moverse de su ciudad natal.

Barkley es un fijo en las alineaciones de Roberto Martínez, un hombre muy querido en Goodison Park por su capacidad de sacrificio. Ya sabe lo que es ser internacional y le auguro un gran futuro porque tiene calidad y es polivalente.