Manuel Neuer no solo es candidato al Balón de Oro 2014 por sus paradas. También lo es por lo bien que domina el juego con los pies, aunque en ocasiones arriesga más de la cuenta.
Pep Guardiola está encantado con él porque no tiene problemas a la hora de iniciar el juego apoyándose con los laterales o los centrales, pero determinadas frivolidades se podría decir que sobran.
Regate de crack
El extécnico azulgrana trata de inculcar a sus jugadores la filosofía de fútbol que aprendió cuando Johan Cruyff era su entrenador. Lo que no sabíamos es que también les enseña a regatear como la leyenda holandesa, cambiando de dirección con un toque sutil por detrás de las piernas.
Neuer lo hizo este pasado fin de semana. Ganaron por 4-0 al Hoffenheim y son más líderes que nunca, pero se la jugó ante Kevin Nolland, que adivinó sus intenciones y estuvo a punto de arrebatarle el balón en el área pequeña. El guardameta bávaro fue lo suficientemente rápido como para darse la vuelta y tocar con la puntera hacia Juan Bernat, que al ver la que acababa de liar acudió al rescate ofreciéndole una salida.