En la enfermería del Barça tienen más trabajo que en los despachos de Volkswagen, donde se suceden las reuniones para afrontar una crisis que ya veremos si le pasa factura al Wolfsburgo (el fabricante es su principal patrocinador). A las lesiones de Claudio Bravo, Rafinha, Vermaelen, Messi y Adriano, ahora hay que sumar la de Andrés Iniesta. El manchego se vio obligado a abandonar el césped del Camp Nou durante el partido que les enfrentó al Bayer Leverkusen.
No fue una lesión cualquiera. Notó un pinchazo en la parte trasera del muslo derecho y se ha confirmado que sufre una lesión en el bíceps femoral que le mantendrá fuera de los terrenos de juego entre cuatro y seis semanas.
Luis Enrique, que suele tomarse las cosas con optimismo, opinó sobre el tema soltando una frase bastante graciosa:
Esto de las lesiones empieza a parecer ya una broma.
Anoche sacaron el partido adelante de milagro, pero ya veremos lo que pasa este fin de semana en el Sánchez Pizjuán. El Sevilla llega a la cita muy necesitado y es especialista en amargar a los culés. No hay que olvidar que la temporada pasada empataron un 0-2 en contra en dicho escenario.
En estos momentos hay 15 jugadores de campo y 2 porteros en condiciones. Bravo reaparecerá este fin de semana, Adriano no jugó ayer por precaución y Vermaelen está en la recta final de su recuperación. Con Messi e Iniesta tocará esperar, y con Rafinha la cosa todavía pinta peor. El brasileño se perderá prácticamente toda la temporada por culpa de aquella brutal entrada que le propinó Radja Nainggolan en campo de la Roma.