¿Hay vida después de Ivan Rakitic? Eso es lo que se pregunta el sevillismo confiando en los conocimientos de Monchi, que se ha convertido en un experto a la hora de confeccionar buenas plantillas con muy poco presupuesto. La mejor época del Sevilla ha pasado, pero de la mano de Unai Emery la afición vuelve a sonreír. La Europa League conquistada en Turín hace unos meses es una clara demostración de que el club sigue siendo grande tanto en España como en el viejo continente.
Experiencia adquirida en Francia
La última incorporación llega desde Francia. El polaco Grzegorz Krychowiak aterriza en el Sánchez Pizjuán procedente del Stade de Reims, club en el que militó las dos últimas temporadas. Ha sido internacional con su selección en 16 ocasiones y ya sabe lo que es debutar con la camiseta del Sevilla, puesto que lo hizo ayer en el partido amistoso que disputaron ante el Olympique de Lyon.
Mide 1,86 metros, tiene 24 años y destaca por lo peligroso que puede ser actuando en banda. Puede aportar muchas cosas tanto en defensa como en ataque y solo el tiempo dirá si han acertado o se han equivocado con él.
Monchi ha explicado que las negociaciones han sido muy largas porque ha habido mucho papeleo de por medio y porque no solo han negociado con el Stade de Reims, sino que también han tenido que negociar con el Girondins de Burdeos, club que le traspasó al Stade de Reims en 2012 asegurándose un tanto por ciento de un hipotético traspaso que se acaba de producir.
No será el último refuerzo del verano
Por último, comentar que no será el último refuerzo del Sevilla esta temporada. El sexto hombre que estará a las órdenes del de Fuenterrabía será un medio centro organizador. Eso sí, no tienen prisas por incorporarlo porque «la precipitación cuesta dinero». Palabra de Monchi.