El Everton se la va a volver a pegar esta temporada. Es un equipo confeccionado para pelear por los puestos europeos, pero no parece que ese vaya a ser el objetivo real de los de Ronald Koeman visto lo visto en las primeras jornadas de la Premier League.
En estos momentos ocupan la decimosexta posición con 7 puntos de 21 posibles, lo que les ha situado a dos puntos del descenso. Es una situación que nadie esperaba en el club, así que no sería nada raro que anunciaran la destitución del técnico holandés en las próximas horas.
El Burnley le ha dejado contra las cuerdas
La última derrota, la de ayer en casa ante el modesto Burnley por 0-1, ha abierto todavía más la brecha que existe entre Koeman y los aficionados. Éstos han dejado de confiar en él y exigen que haya un cambio en el banquillo cuanto antes, aunque por ahora no está nada claro que vaya a ser destituido.
Perder cuatro de los últimos cinco partidos de la Premier preocupa, como también preocupa que solo hayan sido capaces de marcar cuatro goles en siete partidos. Está claro que echan de menos a Romelu Lukaku. Además, la situación no es mucho mejor en la Europa League, donde son colistas de un grupo que lidera el Atalanta seguido por el Apollon Limassol y el Olympique de Lyon.
Jim White, periodista escocés que pudo hablar con Koeman, dijo en el programa radiofónico TalkSport que todavía cuenta con el respaldo de Farhad Moshiri, el propietario del Everton. Los jugadores están con él y se mantiene en el cargo, aunque una nueva derrota en campo del Brighton & Hove Albion propiciaría su despido con casi total seguridad.