Juan Mata está tan a gusto en el Manchester United que no es capaz de imaginarse un futuro negro de la noche a la mañana. ¿Acaso no se acuerda de lo que le pasó en el Chelsea? Allí estaba siendo el rey, el jugador más querido por los aficionados, pero llegó José Mourinho y todo cambió por completo. Con el portugués fue más suplente que titular y solo completó dos de los once partidos que disputó como titular en la Premier League.
Mal recuerdo
La relación que mantenían se deterioró tal y como sucedió años después con Iker Casillas. Eso sí, el vestuario no lo notó porque Mata es un tío inteligente que sabe lo que tiene que hacer en cada momento, así que esperó al mercado de invierno para aceptar la gran oferta que presentó el United, que pagó 45 millones de euros para hacerse con sus servicios.
Mou no hará lo que le diga la afición
En Old Trafford volvió a disfrutar del fútbol y a día de hoy podemos decir sin miedo a equivocarnos que es uno de los jugadores más importantes de la plantilla. La afición está con él y no es difícil encontrar aficionados que lucen su camiseta.
Dicha camiseta podría pasar de moda este verano. Mata quiere seguir porque está convencido de que será titular, pero Mourinho parece tener otros planes. El portugués podría ordenar su venta y fichar a otros jugadores de su perfil como James Rodríguez, que al contar con Jorge Mendes como representante tiene muchas posibilidades de convertirse en un diablo rojo. El único que puede quitarle esa idea de la cabeza es Ed Woodward, aunque a Mou nunca le ha gustado que los dirigentes se inmiscuyan en sus decisiones. En todo caso lo hablará con Sir Alex Ferguson, director deportivo del club por el que siente respeto y admiración.
¿Le van a faltar ofertas si le ponen el cartel de transferible? Desde luego que no. En febrero ya se le relacionó con el Barça, así que no debería preocuparse demasiado.