A Juan Carlos Garrido se le ha terminado el crédito. El Villarreal está cuajando una muy mala temporada tanto en la Liga como en la Champions League, algo que ha hecho que el Consejo de Administración del club se haya planteado ya su destitución. La última derrota por 0-3 ante el Levante en casa ha sido le gota que ha colmado el vaso de la paciencia de más de uno.
La afición ya no le quiere, se pueden escuchar gritos de «Garrido vete ya». Las opciones en Europa son prácticamente nulas para pasar a octavos de final y en Liga ocupan la decimosexta posición a 13 puntos del líder. De hecho, esta temporada el Villarreal sólo ha ganado dos partidos de doce disputados (ante el Odense en la previa de la Champions y ante el Mallorca en Liga). La situación es límite y lo peor de todo es que el miércoles se enfrentan al Real Madrid en el Santiago Bernabéu. Pocos piensan que de allí puedan sacar algo positivo, así que la etapa Garrido podría terminar en menos de 48 horas.