El bueno de José Antonio Reyes seguirá disfrutando del fútbol muy lejos de España. El ex del Espanyol, que abandonó la entidad catalana tras no llegar a un acuerdo de renovación, ha decidido probar suerte en una de las ligas que están más de moda. Jugará en el Shanghái Shenhua que dirige Gustavo Poyet y compartirá vestuario con otros ilustres del fútbol mundial: Carlos Tévez, Freddy Guarín y Obafemi Martins.
Dinerito fresco
Se trata de una gran oportunidad para el centrocampista español. No a nivel deportivo, desde luego, pero sí a nivel económico. En China podrá cobrar lo que ningún equipo europeo estaría dispuesto a pagarle, así que aprovechará la recta final de su exitosa carrera deportiva para ganar unos cuantos millones de euros. Eso sí, por ahora no ha trascendido ni cifra que se embolsará ni los años que pasará allí.
No cumplió las condiciones para seguir en el Espanyol
Espero que le vaya mucho mejor que en el Espanyol, donde la temporada pasada no llegó a jugar los partidos que le exigían para renovar un año más. Quique Sánchez Flores le dejó en el banquillo en 20 ocasiones y solo le dio la titularidad en 10. Por eso ahora no le queda más remedio que irse a una liga menor.
¿Compañero de Tévez?
Dicen que la llegada de Reyes podría significar el adiós de Tévez, a pesar de que no ocupan la misma posición ni tienen el mismo caché. El argentino es uno de los futbolistas mejor pagados del mundo, pero su rendimiento está siendo bastante pobre (solo ha marcado dos goles en once partidos en la Superliga china) y los propietarios del club se han cansado de él. ¿Su destino? Casi seguro que Boca Juniors.