No lo ha dicho el Valencia, pero no es difícil predecir que van a negociar su salida en los próximos meses. Jaume Domènech ha pasado de titular indiscutible a ver los partidos desde la grada. Matt Ryan le quitó el puesto antes de que Diego Alves volviera a una convocatoria, y con el brasileño ya recuperado las cosas pintan todavía peor para el canterano.
Era titular indiscutible
Es una situación difícil de entender la que está atravesando. Empezó la temporada en el filial, alejado de los focos, pero Nuno Espírito Santo le dio una oportunidad y respondió sacando muy buena nota. Más de uno nos preguntábamos por qué había pasado tanto tiempo en el Valencia Mestalla siendo un portero de tanto nivel. Estaba brillando tanto en Liga como en Champions y más de un club empezaba a preguntar por su cláusula de rescisión para llevárselo.
A Neville le ha dado por cambiar
En septiembre renovó hasta junio de 2018 y parecía que todo era de color de rosa. Le piropeaba Nuno, la afición se rendía a sus paradas y sus compañeros se sentían seguros. Sin embargo, Gary Neville se lo ha cargado de la noche a la mañana, sin dar explicaciones. Ha colocado a Ryan y ahora es el turno de Diego Alves, a quien esperaban desde hacía mucho tiempo.
Renovación trampa a la vista
Así las cosas, el guardameta de 25 años tendrá que escuchar ofertas para no frenar su progresión. ¿El problema? Cuando renovó lo hizo con el contrato base de todo jugador que pasa del filial a la primera plantilla. Su cláusula de rescisión es muy baja y tampoco cobra demasiado. Por eso se van a sentar a negociar en las próximas semanas. El jugador quiere cobrar más y el Valencia quiere sacar tajada de su traspaso, así que no les costará mucho llegar al apretón de manos siempre y cuando la cláusula sea razonable.