Asier Illarramendi costó 30 millones de euros y tiene 24 años. Eso significa que no es ningún chaval y que se le ha fichado pagando una elevada cantidad de dinero por lo bien que lo había hecho en la selección española.
Todo el mundo confiaba en él como futuro sustituto de Xabi Alonso, pero ahora hay muchas dudas sobre su rendimiento. No está dando la talla y en los últimos partidos ha defraudado a un Carlo Ancelotti que podría dejarle en el banquillo en la final de la Champions League.
El recambio natural genera demasiadas dudas
Era el recambio natural ante la baja de Alonso por sanción, el medio centro defensivo que debía jugar junto a Luka Modric, que aunque es un perro de presa suele asumir el rol de centrocampista más ofensivo por la calidad que tiene. Sin embargo, a día de hoy es más probable que Isco sea titular, e incluso diría que la opción de Casemiro va ganando enteros con el paso de las horas. Lo que parece poco probable es que Sami Khedira llegue a tiempo, puesto que todavía no tiene ritmo de competición.
Malos partidos ante Valencia y Valladolid
Illarra jugó bastante mal ante el Valencia en el Santiago Bernabéu. Fue titular, pero Ancelotti se dio cuenta de que le temblaban las piernas y le dejó en el banquillo en el descanso. En Valladolid empezó como suplente, pero tuvo su oportunidad en la segunda mitad y no supo aprovecharla. Así las cosas, y a falta de que se disputen dos partidos de Liga más antes de la gran final, no creo que el ex de la Real Sociedad tenga opciones de jugar el partido más importante del año.
¿Tú quién crees que acompañará a Modric en el centro del campo del Estadio Da Luz?