Les valía con un empate. Un punto ante el desconocido Zorya Luhansk les metía en dieciseisavos de final de la Europa League, una competición a la que el Manchester United debe aferrarse para obtener su billete para la Champions League de la temporada que viene, ya que en la Premier League las cosas se están poniendo muy feas.
Toda la carne en el asador
José Mourinho, sabedor de la importancia de obtener esa clasificación, no se andó con tonterías y alineó a todos los futbolistas a los que considera titulares. Apostó por Paul Pogba, Zlatan Ibrahimovic, Juan Mata, Wayne Rooney… Solo dejó en el banquillo a David de Gea para dar minutos al argentino Sergio Romero, y la única sorpresa fue la inclusión del armenio Henrikh Mkhitaryan, que poco a poco va cogiendo el tono físico mientras se adapta a su nuevo equipo.
Genialidad del mago armenio
El ex del Borussia Dortmund se inventó un gol de auténtico crack tras la reanudación. Lanzó un caño a uno de los defensas del Zorya y definió sin problemas para adelantar a los diablos rojos. Era su primer tanto como jugador del Manchester en un partido oficial.
La sentencia llegó al borde del pitido final, cuando Pogba lanzó un balón largo que habilitó a Ibra para definir sin oposición. El sueco esperó el momento oportuno para disparar y no falló.
Mou, contento con el trabajo
Tras el partido, en la habitual entrevista a los entrenadores, Mourinho se mostró satisfecho por la actuación de los suyos. Dijo que estuvieron sólidos y fueron profesionales, que la clasificación no peligró en ningún momento. También dijo que ahora se van a centrar en la Premier, ya que la Europa League no se volverá a jugar hasta dentro de unos meses.
Pasan como segundos de grupo
El United no acabó primero de grupo porque el Fenerbahçe fue capaz de derrotar al Feyenoord a domicilio por la mínima.