Las malas lenguas ya empiezan a especular con la salida de Zlatan Ibrahimovic, que es evidente que está en venta después de lo poco que ha ofrecido esta temporada tras llegar como una estrella procedente del Inter de Milán. El delantero sueco empezó muy bien marcando goles, pero la racha se le terminó y su apatía en el campo ha desquiciado a los aficionados, a Guardiola y a la directiva.
Todo eso, acompañado por la llegada de David Villa y el buen momento de forma de Bojan Krkic, hacen que su salida sea inevitable. Está claro que no podrán recuperar el dinero perdido en esa operación en la que entró Samuel Eto’o y encima tuvieron que pagar (también es verdad que llegó Maxwell, aunque poco valor tiene el brasileño). Sin embargo, es mejor venderlo ahora que dejar pasar un año más, pues puede que su caché caiga todavía más en picado al ser suplente, algo parecido a lo que pasó con Ronaldinho, que al final no se vendió por la cantidad estratosférica que se podía haber vendido cuando empezó su declive.
Según el diario Marca, lo primero que ha hecho el Barça al terminar la Liga ha sido ofrecer a Ibrahimovic al Real Madrid. Sin embargo, los blancos no están por la labor de fichar al sueco, y mucho menos si José Mourinho termina dirigiendo al equipo de la capital. Así las cosas, parece que la única salida clara para el delantero tiene un destino muy claro: Inglaterra. Tanto el Chelsea como el Manchester City podrían pujar por él ofreciendo como mucho unos 35 millones de euros.