Como era de esperar, ayer se vivió un partido muy aburrido en el Allianz Arena. Se enfrentaban el Bayern de Múnich y el Manchester City, que son dos grandes equipos, pero la ausencia de titulares y la falta de rodaje propiciaron que los aficionados se aburrieran desde el minuto 1 hasta el 90.
Abrazo con Ancelotti
La vuelta de Pep Guardiola a Múnich fue como se esperaba. El público le recibió bien y se fundió en un abrazo con Carlo Ancelotti, al que fue a buscar al banquillo sabedor de que todas las cámaras le buscaban. A partir de ahí empezó el espectáculo, que como digo no fue tal.
Un canterano decidió el partido
Los locales se impusieron por la mínima gracias a un gol del joven Erdal Öztürk, que a sus 20 años va a tener la oportunidad de lucirse con el primer equipo en pretemporada. Después será Carletto quien decidirá si debe seguir o no con la primera plantilla.
Su gol fue bastante afortunado. Primero porque recibió el balón después de que el árbitro interceptara un pase de un jugador del City, y más tarde por ver como su disparo golpeaba en las piernas de un rival para acabar en gol. Sucedió en el minuto 76, cuando más de uno daba por hecho que el partido acabaría con empate a cero.
Duelo Guardiola – Mourinho a la vista
Queda claro que a Guardiola le queda mucho trabajo por delante, pero lo de ayer no debería preocuparle lo más mínimo. Jugaron muchos suplentes y ni siquiera estuvieron en el estadio jugadores tan importantes como David Silva, Nolito, Kevin De Bruyne o Raheem Sterling. El próximo bolo de los ‘citizens’ será ante el Manchester United de José Mourinho el lunes 25 de julio a las 13:30 horas.