¡Cuidado que viene Guardiola! Los jugadores del Manchester City deben estar bastante intranquilos ante el inminente aterrizaje de Pep Guardiola. No hay que olvidar que su fichaje por el Bayern de Múnich provocó la marcha de jugadores tan importantes como Mario Gómez, Luiz Gustavo o Emre Can. Aprobó la venta de todos ellos y fichó a futbolistas de su agrado (Thiago Alcántara) y que han dejado de agradarle (Mario Götze).
Tres vacas sagradas en la cuerda floja
Sabemos que no cuenta con Yaya Touré y Vincent Kompany. El capitán tiene los días contados y en su lugar llegará un central de primer nivel. Todo apunta a que será Aymeric Laporte, pero por ahora no hay nada oficial.
Kompany no será el único veterano de la plantilla que tendrá que hacer las maletas, puesto que Joe Hart tampoco es santo de su devoción. El guardameta de la selección inglesa, que a mí nunca me ha gustado, tendrá que conformarse con la suplencia o aceptar el traspaso a otro club. Puede que sea una buena oportunidad para el Liverpool, que empieza a ver lo de Marc-André ter Stegen como algo imposible (su cláusula de rescisión es de 80 kilos).
La revolución está a la vuelta de la esquina y Hart, por si acaso, demostró de lo que es capaz en el partido de anoche. Se lució en el penalti lanzó Zlatan Ibrahimovic, aunque en su contra podríamos decir que regaló el 2-1 a Adrien Rabiot despejando un remate con poca contundencia un remate de cabeza forzado de Edinson Cavani.