Alexis Sánchez, uno de los futbolistas de los que más se está hablando durante el mercado de invierno, no vestirá la camiseta del Manchester City como parecía que iba a suceder semanas atrás. El chileno pide mucho dinero y Pep Guardiola no está dispuesto a tirar la casa por la venta. El tema del dinero no es un tema que le incumbe porque él no pone ni una sola libra de su bolsillo, pero es consciente de que su fichaje podría poner patas arriba el vestuario por el tema de su salario.
El City no quiere generar malestar en el vestuario
La renovación de Kevin De Bruyne se encarecería una barbaridad y lo mismo podría pasar con otros jugadores que están creciendo en el líder de la Premier League. Es un fichaje tentador, desde luego, pero no quieren desestabilizar una plantilla que esta temporada lo está bordando.
Alexis se va del Arsenal por dinero, no por otra cosa. Ha rechazado las ofertas de renovación que le han puesto sobre la mesa porque quiere convertirse en uno de los mejor pagados del mundo. Desde que llegó ha rendido a un grandísimo nivel, aunque esta temporada no se le ve tan enchufado. Supongo que la incertidumbre que le rodea no le permite estar centrado al 100%.
Con la decisión ya tomada, el City probablemente fichará a otro jugador para reforzar su plantel, aunque en mi opinión no les hace falta. Si las lesiones no hacen acto de presencia, tienen madera más que suficiente para terminar la temporada con todas las opciones del mundo.
Ahora suena para el Manchester United
La situación podría aprovecharla el Manchester United, que no descarta cumplir los deseos de Alexis, ya sea durante el mercado de invierno o el próximo verano. Los ingleses podrían invertir parte del dinero que le pagan ahora mismo a Zlatan Ibrahimovic, que por lo visto tiene un pie y medio fuera de Old Tafford. Además, el armenio Henrikh Mkhitaryan podría entrar en la operación si finalmente se lleva a cabo antes de que se cierre el mercado invernal.