El futuro de Fernando Torres solo lo conoce Sandro Rey. Ni siquiera el propio futbolista es capaz de decir qué camiseta vestirá a partir del año que viene. En el Milan se están cansando de su pobre bagaje goleador (solo ha marcado un tanto en diez partidos) y a Adriano Galiani cada vez le cuesta más disimular su descontento. La última vez que le interrogaron dijo que confiaban en él con la boca muy pequeña y mirando para otro lado. Y a Filippo Inzaghi mejor que no le pregunten…
Ofertas europeas y una brasileña
Así las cosas, se había hablado de su regreso al Chelsea antes de lo esperado, pero también de un hipotético interés del Atlético de Madrid para hacerse con sus servicios en calidad de cedido. De hecho, hasta ha llegado a sonar para el Schalke 04 y el Liverpool.
Lo que no me esperaba es que le pudiera llegar una oferta desde Brasil. Por lo visto, el Corinthians quiere suplir la más que probable baja de su delantero Paolo Guerrero (todavía no ha tomado una decisión) fichándole. Necesitan un delantero de garantías para afrontar el campeonato brasileño y la Copa Libertadores, que arranca el próximo 4 de febrero y no termina hasta el 5 de agosto.
El sueldo se queda corto
Los rumores difundidos por el diario brasileño R7 apuntan a una cesión de seis meses que difícilmente contentaría al de Fuenlabrada desde el punto de vista económico. A lo máximo que llegan es a los 550.000 reales brasileños al mes, que al tipo de cambio actual equivale a unos 168.000 euros mensuales. Muy poco para un hombre que ahora mismo está cobrando 4 millones de euros en el Milan.