El Real Madrid no lo tuvo nada fácil esta tarde para derrotar a Osasuna. El conjunto navarro, dirigido por un madridista como José Antonio Camacho, salió sin miedos y a por la victoria. En la primera mitad fueron merecedores de irse al descanso por delante y así lo hicieron. Los blancos, sólo pudieron levantar el partido en la segunda parte gracias a su pegada y a la colaboración arbitral.
Nekounam adelantó a los rojillos en el minuto 20 de partido. Tras un buen centro de Plasil, el iranía remató a placer para hacer inútil la estirada de Iker Casillas. La sorpresa sobrevolaba el Santiago Bernabéu.
A partir de ese momento, las ocasiones fueron para el Real Madrid pero sin llegar a avasallar. A Sergio Ramos se le anuló correctamente un gol por fuera de juego. Corría el minuto 36. Raúl tendría otra al filo del descanso pero Josetxo se cruzó muy oportuno.
La segunda mitad empezó muy bien para el equipo presidido por Vicente Boluda. Sergio Ramos marcaba gracias a un disparo de muy lejos que se comió literalmente Roberto. El 2-1 llegaría un cuarto de hora después. Higuaín marcó a puerta vacía tras recibir el balón en el segundo palo. El argentino volvió a ser el más listo de todos.
La jugada más polémica se produjo en el minuto 82 de partido. Juanfran, un ex madridista, vio la segunda tarjeta amarilla por simular un penalti (la primera amarilla también fue por lo mismo). Curiosamente, los dos fueron penas máximas, algo que Pérez Burrull no vio igual. El alicantino se marchaba a los vestuarios sin creerse lo que estaba pasando. Poco después, para acabar de machacar anímicamente a Osasuna, Robben dejó su sello de calidad estableciendo el 3-1 definitivo tras una gran jugada personal, culminada por un error garrafal de Roberto, nefasto en la tarde de hoy.
Ficha técnica del partido:
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