Estudiantes de La Plata volverá a jugar una final intercontinental después de hacerlo hace 39 años. Los argentinos se impusieron por 2-1 al Pohang Steelers en la primera de las semifinales del Mundialito de Clubes que se está disputando en Abu Dhabi. Un doblete de Benítez fue suficiente para doblegar a un equipo que se quedó con 8 jugadores y un delantero haciendo de portero.
El campeón de la Copa Libertadores sufrió más de lo esperado para llevarse el partido. Nada más iniciarse el choque, Mauro Boselli dispuso de una gran ocasión que pudo atajar el meta coreano de los Steelers. A partir de ahí se fueron creciendo poco a poco los coreanos hasta que Leandro Benítez hizo su primer gol tras el lanzamiento de un tiro libre directo que nadie se atrevió a despejar. Era un gol psicológico que llegaba en el tiempo de descuento.
En la segunda mitad llegó el segundo de Benítez en el minuto 53. Inmediatamente después llegó el carrusel de expulsiones. Shin Hwa Yong, Jae Won y Kim Jae Sung se fueron a la calle en menos de 21 minutos. Entre expulsión y expulsión, los asiáticos lograron recortar distancias gracias a Denilson, quien marcó en posición antirreglamentaria, la misma en la que se encontraban tres compañeros más de su equipo. No hace falta decir que el colegiado, el italiano Roberto Rosetti, estuvo horrible.
Ahora los argentinos esperan al Atlante o al FC Barcelona en la final.