No hay margen de error. España viajará a París con la obligación de ganar para no complicarse la clasificación para el Mundial de Brasil. Es verdad que el segundo va a la repesca, pero también es verdad que el peor segundo de todos los grupos se elimina. Y ahora mismo España es de los peores segundos.
El batacazo ante Finlandia no se lo esperaba nadie. Ni las bajas de Xavi Hernández y Xabi Alonso hacían presagiar un desenlace como el del pasado viernes. Los nórdicos jugaron un partido muy serio en defensa y España no tuvo el acierto de otros días. El gol de Sergio Ramos al inicio de la segunda parte parecía sentenciar la contienda porque los visitantes ni habían disparado a puerta, pero en un contraataque se plantaron ante Víctor Valdés y empataron un partido en el que cedieron un 85% de la posesión de balón.
Así las cosas, Saint-Denis dictará sentencia mañana. Si Francia gana se acabó lo que se daba. Si se produce un empate todavía quedarán varias jornadas en las que puede pasar de todo, ya que los galos deben viajar a Georgia y Bielorrusia, dos salidas bastante complicadas. Y en el mejor de los casos, si España gana dependerá de sí misma para estar en Brasil sin tener que jugar la repesca.
¿Qué creéis que pasará?