La selección española volvió a demostrar por qué es la campeona de Europa y una de las favoritas al próximo Mundial 2010 que se disputará en Sudáfrica. Antes de partir precisamente a ese país para disputar la Copa Confederaciones, los de Vicente del Bosque hicieron transbordo en Azerbayán para llevarse 750.000 euros por un amistoso que terminó en goleada de la roja.
No era un partido de tenis pero finalizó con sabor a set en blanco. Nada más y nada menos que 6 goles fueron los que lograron los nuestros, tres en cada parte. El protagonista del primer tiempo fue David Villa con un hat-trick (el tercero de penalti). Gracias a esos goles, ya es el tercer máximo goleador de la historia de la selección.
Ya en la segunda parte, con Villa en el banquillo para guardar algunos goles para la semana que viene, Albert Riera, Dani Güiza y Fernando Torres ampliaron la cuenta en un partido que fue un amistoso en toda regla, por no decir que fue una pachanga.
Los 20.000 espectadores que se dieron cita en el estadio Tofik Bahramov vieron como España ya acumula 32 partidos sin perder, cifra histórica que ojalá se mantenga tras volver de Sudáfrica.