Da la sensación de que Unai Emery se sentirá mucho más cómodo en el Arsenal que en el PSG. En Francia perdió toda su credibilidad en materia de fichajes después de lo que pasó con Krichowiak y Jesé, a los que trajo expresamente y ninguneó por completo. En Inglaterra, sin embargo, parece que van a tener muy en cuenta su opinión, tal y como sucedía cuando estaba Arsène Wenger en el banquillo.
El técnico de Fuenterrabía se está reuniendo con todos los jugadores de la plantilla para comunicarles lo que piensa de ellos. Jack Wilshere, por ejemplo, ya sabe que se tendrá que buscar la vida en otro equipo si quiere jugar.
Su currículum le ha condenado
Emery no se ha andado con chiquitas y le ha dicho a Wilshere que no cuenta con él, que como mucho podría disfrutar de minutos en competiciones menores ante rivales de inferior categoría. Quiere una plantilla trabajadora, sin jugadores con fama de problemáticos, así que de momento ha despachado al futbolista inglés, que como era de esperar se ha quedado fuera del Mundial de Rusia.
Acababa contrato
Como su contrato expira el próximo 30 de junio, Wilshere podrá marcharse al club que quiera con todas las facilidades del mundo. No tendrán que pagar nada por él y como mucho saldrá ganando gracias a la típica prima de fichaje que piden quienes se encuentran en su último año de contrato. Eso sí, visto lo visto en sus últimas temporadas, dudo que haya un club dispuesto a tirar la casa por la ventana pagando una elevado prima de fichaje y ofreciéndole una ficha como la que cobraba en el Arsenal.