Dispararon más veces a puerta, tuvieron más posesión de balón y buscaron la victoria con más ahínco. A pesar de ello, el marcador final fue de 0-0 y eso complica mucho la clasificación del Manchester United para los octavos de final de la Champions League.
Insistencia sin recompensa
El PSV, el único equipo que les había ganado en esta fase de grupos, no se dejó intimidar por el ambiente de Old Trafford. El conjunto holandés tuvo la primera ocasión clara del partido, y una de las pocas que inquietó a un David de Gea que estuvo atento para volar y blocar el disparo.
A partir de ese momento, el United fue el que tomó las riendas del partido. Anthony Martial tuvo un par de buenas ocasiones en la primera parte, pero se topó con las piernas y los guantes de Jeron Zoet. La segunda mitad tuvo el mismo guión, pero esta vez las ocasiones más claras fueron para Jesse Lingard.
La joven apuesta de Louis van Gaal pudo desequilibrar el partido con dos remates que no acabaron en gol por muy poco. El 0-0 fue un resultado un tanto injusto para los locales, pero la falta de acierto les condena a jugársela dentro de dos semanas en Wolfsburgo.
Gran victoria del Wolfsburgo en Rusia
Allí les espera un equipo que todavía no tiene su billete para los octavos de final. Derrotaron por 0-2 al CSKA de Moscú gracias a un doblete de André Schürrle, pero para finiquitar su pase están obligados a empatar o a ganar al United en el Volkswagen-Arena.
Los dos pueden clasificarse siempre y cuando el PSV no gane y el United puntúe. Los holandeses dependen de sí mismos, ya que una victoria ante el CSKA les vale para estar en el bombo del próximo 14 de diciembre.
Así está el grupo
Wolfsburgo: 9 puntos
Manchester United: 8
PSV: 7
CSKA de Moscú: 4