El Glasgow Rangers ha pasado a la historia. El legendario club escocés, con casi 130 años de historia, ha desaparecido después de declararse ayer en bancarrota. Sin embargo, el empresario Charles Green lo ha comprado aportando 5,5 millones de libras (unos 7 millones de euros) para refundarlo bajo el nombre de The Rangers Football Club.
A día de hoy no está inscrito en ninguna liga y si no se acepta su participación en la Premier League escocesa se vería obligado a empezar desde la Tercera División. Eso sin duda sería algo dramático para los millones de fans que tiene en todo el mundo un equipo que ha ganado 54 veces la competición doméstica y que también sabe lo que es ganar una Recopa de Europa (1972).
El equipo seguirá jugando en el estadio de Ibrox, con capacidad para 51.082 espectadores. Lo que no está tan claro es si los jugadores van a continuar, pues ninguno de ellos está dispuesto a jugar en Tercera División.
Para Green (en la imagen) los jugadores están en la obligación de seguir porque sino «incumplirán su contrato si no se unen a la nueva sociedad, The Rangers Football Club».
Veremos qué es lo que sucede con este mítico club que tan mal lo está pasando en estos momentos.