Nasser Al-Khelaïfi no se rinde. El presidente del PSG quiere ganar la Champions League a toda costa. Esta temporada se han quedado a las puertas de los cuartos de final, pero el año que viene lo volverán a intentar con una plantilla todavía más poderosa que la que tienen ahora.
El adiós de Zlatan Ibrahimovic no será un problema porque tienen varios fichajes de nivel en mente. Uno es el de Neymar, que por ahora parece complicado, y otro es el de Sergio Busquets, que en mi opinión pinta todavía más difícil.
Feliz en Barcelona
El centrocampista catalán ya dijo una vez que solo había dos personas que podrían apartarle del Barça: su mujer y Pep Guardiola. El de Santpedor podría llevárselo al Manchester City para ocupar el puesto que dejará libre Yaya Touré cuando se marche. Es una operación que se antoja casi imposible, pero por lo menos los ‘citizens’ juegan con ese factor diferencial de tener a Guardiola en el banquillo.
La liga francesa no tiene tirada
El PSG tiene a Laurent Blanc y un problema bastante gordo: juega en la Ligue 1. Algunas estrellas se han negado a fichar por el conjunto parisino para no caer en el olvido jugando una competición que no motiva en absoluto. La Premier League y la Liga están muy por encima en cuanto a nivel y repercusión mediática, así que Al-Khelaïfi solo podrá recurrir al potencial económico de Qatar Investment Authority para convencerle.
Ofertón para el Barça y para Busquets
El Barça no quiere negociar. Rechazó los 75 millones de euros que le ofrecieron antes de iniciar las negociaciones para renovar su contrato a finales de 2015. En esta ocasión, sin embargo, la oferta podría subir a 100 millones de euros, que ya son palabras mayores. Su traspaso se equipararía a los de Cristiano Ronaldo, Neymar y Gareth Bale, los más caros de la historia del fútbol por ahora.
Quien también tendría razones para tener una charla con la almohada es el propio Busquets. Le van a ofrecer más de 16 millones de euros brutos por temporada, que es lo máximo que está dispuesto a poner el Barça sobre la mesa para que no se vaya. Eso sí, debe decidirse pronto, porque están confeccionando la plantilla 2016-2017 y no van a esperar eternamente.