El Milan pudo frenar la racha de victorias de un FC Barcelona que trató de marcar algún gol en San Siro para encarrilar los cuartos de final de la Champions League. Los de Pep Guardiola hicieron todo lo posible para llevarse el partido, pero lo italianos jugaron un partido muy serio en defensa y visitarán el Camp Nou con muchas opciones de pasar a semifinales.
Los de Massimiliano Allegri pusieron una barrera en defensa y por ahí no pasó nadie, ni siquiera Leo Messi. Se mostraron muy peleones durante los 90 minutos y demostraron estar encantados con el empate a cero, como si del Apoel Nicosia se tratara.
El partido estuvo marcado por la polémica. Jonas Eriksson, el colegiado, no pitó dos claros penaltis cometidos por el Milan, uno sobre Alexis y otro sobre Carles Puyol. Guardiola no quiso hablar de ello en la rueda de prensa posterior al encuentro, pero algunos jugadores como Víctor Valdés no pudieron ocultar su malestar.
Todo se decidirá en el Camp Nou con el Barça como favorito. Eso sí, el Milan tiene pólvora y jugadores muy experimentados, así que el público tendrá que espolear a los suyos más que nunca para lograr una clasificación que será muy sufrida.