En el Manchester United todo son dudas. Ocupar la décima posición a estas alturas era algo que no esperaban. Por eso se empiezan a plantear la venta de Robin van Persie y surgen las primeras dudas sobre el trabajo de Louis van Gaal, que llegó con la obligación de ganar la Premier League y ni siquiera está colocando a su equipo cerca de las cuatro plazas que te dan derecho a jugar la Champions League la temporada que viene.
En ese mar de dudas también flota la figura de Radamel Falcao. Lograron su cesión y vendieron a Danny Welbeck al Arsenal, una decisión que parecía ser totalmente acertada cuando se produjo. Sin embargo, ahora mismo más de uno se arrepiente de lo que hicieron.
Demasiado dinero para no estar convencidos
El contrato del delantero colombiano expira el próximo 30 de junio de 2015, fecha en la que estará obligado a volver al Mónaco, que es el club que posee sus derechos. Solo podría evitarlo un pago de 50 millones de euros, que es la opción de compra que fijaron en su día para que no se moviera de Old Trafford.
Casi todos pensábamos que se haría efectiva al finalizar la temporada, pero con el transcurso de las jornadas eso no está tan claro. No están contentos con su rendimiento, ya que los goles no están llegando y Wayne Rooney sigue echando en falta a un compañero de ataque que sea resolutivo. Falcao siempre lo ha sido, pero la grave lesión que sufrió en su rodilla le ha hecho bajar su nivel, por lo menos por ahora.
En cualquier caso, hay que esperar hasta final de temporada porque en el fútbol todo puede cambiar de la noche a la mañana. Si Falcao muestra su mejor versión y el United se coloca arriba a base de victorias, los directivos del club harán un esfuerzo para que se quede y los aficionados lo agradecerán.