No parece que el culebrón Cristiano Ronaldo vaya a terminar en los próximos días. Su relación con Erik ten Hag está completamente rota y el club no ha hecho otra cosa que apoyar al técnico holandés, lo cual me parece perfecto porque ningún jugador está por encima de la entidad.
El ex del Ajax quiere que el vestuario esté unido y no desea que un futbolista egoísta y caprichoso lo emborrone todo. Por eso ha decidido apartar a Cristiano del equipo, que no se entrenará con sus compañeros y que no estará convocado para el próximo partido ante el Chelsea.
Cristiano recula con la boca pequeña
CR7, consciente de que había metido la pata hasta el fondo al marcharse a los vestuarios antes de que terminara el partido ante el Tottenham, ha utilizado Instagram para reconocer (entre comillas) que no estuvo bien lo que hizo, aunque no ha pedido disculpas ni nada por el estilo:
Como siempre he hecho a lo largo de mi carrera. He intentado vivir y jugar respetando a mis compañeros, a mis entrenadores y a mis rivales. Eso no ha cambiado. Yo no he cambiado. Soy la misma persona y el mismo profesional que los últimos 20 años. El respeto siempre ha sido muy importante en mi toma de decisiones. Desde muy joven, los jugadores más experimentados han supuesto un ejemplo para mí. Ahora, yo intento ser un ejemplo para los más jóvenes. A veces esto no es posible y la presión del momento nos supera. Ahora solo siento que tengo que seguir trabajando duro en Carrington, apoyar a mis compañeros y estar listo para todo en el siguiente partido. Rendirnos a la presión no es una opción y nunca lo fue. Esto es el Manchester United y tenemos que estar unidos. Pronto estaremos juntos de nuevo.
Una multa que llama la atención
La prensa inglesa asegura que el internacional portugués recibirá una multa que podría alcanzar el millón de libras, lo que para él supone pagar el salario de dos semanas. Sería una multa histórica que no tengo claro si finalmente se va a imponer, pero en cualquier caso ya le han hecho saber su descontento y no van a tolerar ninguna pataleta más. De hecho, no queda nada claro que vuelva a enfundarse la camiseta del United, ya que en todo caso antes tendrá que pedir disculpas a su entrenador y a sus compañeros.
Todas las facilidades para que se vaya en enero
Así las cosas, es evidente que tanto el club como Jorge Mendes trabajarán a destajo para que Cristiano pueda hacer las maletas en el mercado de invierno. Quedan 7 partidos para el Mundial y después veremos qué es lo que pasa. Los ingleses están dispuestos a otorgarle la carta de libertad para facilitar su salida, e incluso dicen que podrían comprometerse a pagar la mitad de su ficha a partir de enero si algún club se hace con sus servicios en calidad de cedido.
Lo que no está claro es que tenga ofertas. Su rendimiento ha caído en picado, cobra mucho y encima es capaz de montar shows como el del otro día. Está claro que no sabe gestionar bien su marca personal, que es lo que más debería preocuparle a estas alturas de su carrera deportiva.